ID: C2017-166
Hospital: Complejo Hospitalario Universitario de Albacete
Ciudad: Albacete
Nº: 166
Aut@r o Autores: Cristina López Cárceles
Ángela López Fernández, María del Rosario Pastor Juan, Patricia Camino Marco, Inmaculada Alcantud González, Alberto Ibáñez Ibáñez
Presentación
Se presenta un caso de ictericia obstructiva secundaria a aneurisma de la arteria hepática, en un paciente de 53 años que consulta por ictericia y prurito de 10 días de evolución, acompañado de coluria y acolia. No antecedentes de interés.
Discusión
La ictericia obstructiva es una patología muy frecuente, cuyas principales causas son coledocolitiasis y neoplasias (adenocarcinoma de cabeza de páncreas o colangiocarcinoma). Sin embargo, debemos conocer otras causas más raras, y con manejo diferente. Entre las causas infrecuentes encontramos, quistes de colédoco, otras neoplasias (linfoma, adenocarcinoma de colon en ángulo hepático o de estómago), sarcoidosis, infecciosas (adenitis tuberculosa, enfermedades parasitarias) y vasculares (aneurismas viscerales). En nuestro caso se trataba de un aneurisma de la arteria hepática. Representan el 20% de los aneurismas viscerales, por detrás de los esplénicos. Son más frecuentes en varones en la sexta década de vida. Pueden ser solitarios (la mayoría) o múltiples, intra o extrahepáticos (60-80%). La ateroesclerosis es la principal causa (otras menos frecuentes, traumatismos, infecciones, vasculitis). Suele aparecer como hallazgo incidental. La triada clínica de Quincke que se presenta con dolor epigástrico, hemobilia e ictericia obstructiva aparece solo en un tercio de los casos. Presenta riesgo de rotura del aneurisma, con una mortalidad elevada, siendo importante el diagnóstico precoz. La primera prueba de imagen a realizar es la ecografía abdominal con Doppler, seguida de angio TC y la arteriografía. Las opciones terapéuticas son embolización, que se realizó en nuestro caso, o cirugía, y se realizará en pacientes sintomáticos, de alto riesgo (múltiples aneurismas, panarteritis nodosa) o con aneurismas mayores de 2 cm.
Conclusión
Los aneurismas de la arteria hepática es una patología poco frecuente, que puede cursar produciendo ictericia obstructiva, y que debemos reconocer radiológicamente ya que el tratamiento de esta puede prevenir posibles complicaciones.
Bibliografía
1. Hanbidge AE, Buckler PM, O'Malley ME, Wilson SR.From the RSNA refresher courses: imaging evaluation for acute pain in the right upper quadrant. Radiographics. 2004 Jul-Aug,24(4):1117-35. 2. Jesinger RA, Thoreson AA, Lamba R. Abdominal and pelvic aneurysms and pseudoaneurysms: imaging review with clinical, radiologic, and treatment correlation. Radiographics. 2013 May,33(3):E71-96 3. Suárez-Grau JM, Rubio-Chaves C, Pareja-Ciuró F, Gómez-Bravo MA, Serrano Diez-Canedo J, García-González I.Ictericia obstructiva secundaria a aneurisma de la arteria hepática. Cir Ciruj 2008, 76:253-256. 4. Puppoa A, Parejab F, Muñoza J, Forasteroc A, Bernardos A.Aneurisma de la arteria hepática. Cir Esp.2007,81(6):348-50.
Imagen A: Imagen ecográfica que muestra lesión nodular a nivel de la intersección de ambos lóbulos hepáticos que muestra flujo Doppler color y espectral arterial, en relación con dilatación aneurismática de la arteria hepática a dicho nivel. Imagen B: TCMD plano axial. Se observa dilatación de la vía biliar intrahepática. Imagen C (TCMD reconstrucción coronal) y D (arteriografía de la arteria hepática) muestran una arteria hepática común displásica con dilatación aneurismáticas en hilio hepático.